jueves, 9 de noviembre de 2017



Denali 2017 Glaciar Muldrow

... Y así comienzan los días en el glaciar, nos despedimos del verde del valle y nos adentramos en el blanco y azul profundo. Serán unos 20 días en el hielo para lograr nuestro objetivo lo cual implica hacer múltiples viajes para mover nuestro equipo y comida así como también para aclimatar debido a la altitud. Nuestro primer día en glaciar nos dejaba contentos de las condiciones y la cantidad de nieve ya que gracias a esto, pudimos arrastrar nuestros trineos desde el principio ahorrándonos múltiples viajes y haciendo nuestra caminata mas amigable.

Cambio de ritmo

Durante el verano de Alaska, las horas de luz durante el día alcanzan casi 23 horas, lo cual permite prácticamente caminar sin linternas en cualquier minuto. Punto importante para nosotros ya que el trayecto que debíamos enfrentar para cruzar el ¨lower Icefall¨ era un terreno muy expuesto a la caída de seracs y el hacerlo en condiciones de frío maximizaba la seguridad de este tramo. Es por eso que tomamos la decisión de cambiar el ritmo (o mejor dicho los horarios) para esta sección. Dormiríamos de día y durante la ¨noche¨ caminaríamos. Esto implicaba una siesta adaptación de nuestro cuerpo que si bien en un inicio costo luego de algunos días ya nos acostumbrábamos al ritmo. Dos veces de ida y vuelta tuvimos que repetir esta sección y cada vez que pasábamos la ansiedad nos envolvía. Tratando de ser lo mas eficientes en una pendiente que no colaboraba con mantener los trineos en la ruta, hacíamos el máximo esfuerzo para cruzar esta sección a máxima velocidad y sin muchos descansos. Superada esta sección, todavía quedaban múltiples obstáculos que superar y esto sin considerar el aumento de la altitud.



El Great Icefall


Ya desde nuestro segundo campamento en el glaciar nos enfrentábamos al Great Icefall, una sección del glaciar que requeriría bastante experiencia en navegación glaciar, buscando la ruta adecuada para sobrepasar este obstáculo. Fue Galen quien se aventuro en liderar esta sección y la verdad es que el desafío fue bastante complejo ya que la primera aproximación se hizo en condiciones de poca visibilidad en la cual múltiples veces tuvimos que retroceder en nuestros pasos para encontrar una zona menos agrietada o definitivamente encontrar un camino que nos permitiera pasar hacia la siguiente parte del glaciar que era mas plano y menos agrietado. Afortunadamente luego de algunas horas de marcha, de avance y retroceso logramos llegar a lo que seria nuestro campamento por algunos días antes de enfrentar el famoso filo de la ruta muldrow, el Carsten ridge.

... continuara

















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